Te doy este poema para que guardes
las palabras que son tuyas más que mías.
Te lo obsequio aun cuando no sepa
qué versos le van mejor a tus ojos,
cuando no tenga más que decir que un te amo
escaso y desprolijo, envuelto
con palabras gastadas.
Te doy este poema para que sepas
que estás en mi poesía, en lo que escribo
cuando escribo lo que siento.
Te lo entrego así, sucio y despeinado
como cuando lo invente,
con toda esta tristeza de tenerte
en mis versos porque no te alcanzan mis brazos.
Te regalo este poema para que lo cuelgues en la puerta de tu casa,
y lo vean los que creen que eres un juego,
una más entre las otras.
Es tuyo porque quiero que lo sea,
porque ya no alcanza con nombrarte en silencio,
porque te mereces que la voz del poeta
te nombre esta noche
para decirte te amo.