Esta mierda sigue latiendo en mi pecho

Esta mierda sigue latiendo en mi pecho.

Despierto y pienso:
"no he muerto,
sigo vivo."
Y maldigo.
Quizás yo mismo sea mi enemigo.

Abro fuego, hiero...
Te hago el odio
con los ojos bien abiertos
como te hacía el amor.

Tengo un nuevo nombre:
me protege.

Tengo en la boca muertes
bien conocidas:
aman como diablos
lloran como niños.

Te recorro con un beso.
Huyo por tu boca,
duelo,
y aunque lo anhele con toda mi vida
no muero.