"...este rayo ni cesa ni se agota..."
(M. Hernandez)
Con todas mis aguas hice un desierto
Con todas mis aguas hice un desierto.
Lo alojé en mi brazo izquierdo,
lo senté en un trono
y le dí mieles.
Lo hice sin arenas, por los relojes
y por esa cuestión del tiempo.
Lo hice con la sed de todas mis aguas.
Lo hice para no beberlas.