Leticia voló sobre los tejados
Sobrevoló un techo de tejas rojas
con patio al fondo
y pileta.
Pensó
¡Qué buenos seria
vivir en esa casa!
Pero recordó que el abuelo
le enseño a volar
pero nunca a aterrizar.
¿Como hago para bajar? Se preguntó.
Podría chocar contra algo, una torre,
una pared...
pero seria doloroso.
Podría enredarme en las ramas de algún árbol
aunque me rasguñarían las ramas.
¡Ya sé! dijo entonces
volaré bajito cerca del suelo
y le pediré a alguien que me agarre!
¡Así podré dejar de volar!
Comenzó entonces a volar en círculos
una y otra vez aparecía el techo de tejas rojas
y cada se vez se lo veía mas cerca!
Esta funcionando! gritó Leticia
y así era realmente.
Cuando quiso acordar estaba ya tan cerca del suelo
que casi podía tocar el techo
y luego más abajo y más abajo...
¡Al fin logro volar casi rozando el césped!
Pero no había nadie en aquel patio,
nadie que pudiera agarrarla de un brazo y bajarla!
Y Leticia siguió dando vueltas en círculos
¡Ya va a venir alguien! pensó
y, poco a poco,
sin darse cuenta,
bajaba y bajaba cada vez mas.
tanto que, sin darse cuenta,
en una vuelta,
toco el agua y cayo a la pileta.
Leticia flotaba en el agua y recordaba
cuando el abuelo le enseñaba:
"volar? volar debe ser como salir a la vida...
aterrizar debe ser igual que morir".